Como parte de una tradición mundial, el 14 de Febrero se ha convertido por excelencia en el día del amor, o el día de San Valentín como mejor se le conoce, y como parte de una tradición casi obligatoria en japón, no podemos dejar de resaltar la manera peculiar en que se celebra este día, que además de tener la costumbre de regalar grandes cantidades de chocolates, aprovechan la ocasión para sumergirse en él. Como es bien conocido el chocolate posee propiedades antioxidantes y es especialmente beneficiosa para la piel, por lo cual se ha dispuesto por estos días de una bañera comunal de cacao en la que, además de cuidar su piel, hacen dulces amistades.
Esta inmersión en el llamado ‘alimento de los dioses’ es posible en el centro de spa ‘Yunessun‘, situado en la región montañosa de Hakone, en la provincia de Kanagawa (centro de Japón), a unas dos horas del ajetreo de la ciudad de Tokio. El complejo cuenta con tres bañeras redondas, llenas de una mezcla de agua con cacao y cada una de ellas con capacidad para albergar a una decena de personas.
En Japón el consumo de chocolate es obligatorio el día de San Valentín, miles de enamorados se acercan al monte Fuji, en Izu, para tocar la “campana del amor” tres veces mientras pronuncian el nombre de su amado para convertir su relación en amor eterno y verdadero.
El día de San Valentín el chocolate volverá a ser protagonista en Japón y, en este caso, no se limitará únicamente a los enamorados.
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